La interacción entre el sueño y los comportamientos relacionados con el trabajo influye en muchos aspectos del desempeño, la seguridad y la salud de los empleados, así como en el éxito a nivel organizacional.
Aunque está bien establecido que la cantidad y la calidad del sueño pueden afectar diferentes tipos de desempeño de tareas y la salud personal, las interacciones entre los hábitos de sueño y los comportamientos organizacionales han recibido mucha menos atención.
Es importante examinar cómo se relacionan los hábitos de sueño y los comportamientos en el lugar de trabajo y el papel del ritmo circadiano subyacente en el impacto potencial del sueño y la somnolencia en el lugar de trabajo.
Desarrollar una comprensión más profunda de cómo los hábitos de sueño y la somnolencia afectan a los trabajadores y la organización puede ayudar a proporcionar los antecedentes necesarios para que la gestión de recursos humanos desarrolle redes de apoyo más progresivas para los empleados que beneficien tanto al trabajador como a la organización.
Los recursos humanos y los empleados deben enfatizar el impacto del buen sueño y los hábitos de sueño en la productividad y seguridad organizacional e individual.